Eliminar el vello de las axilas siempre ha sido una práctica muy popular, y es que muchos hombres simplemente no quieren pelo en la axila por diversos motivos. Sin embargo, dada la anatomía del hueco de la axila y sus curvas, añadido a las desventajas de los sistemas de depilación tradicional, el láser diodo se ha convertido en el mejor sistema para eliminar el vello de las axilas en los hombres. 

A la hora de rasurar las axilas con la cuchilla o incluso con una maquinilla de afeitar, es fácil que se produzca algún pequeño corte o herida o que se irrite la piel cuando es rasurada a contrapelo. Dado que esta zona del cuerpo es propensa a la sudoración, es muy probable que se desarrolle una foliculitis (granitos) o pequeña infección de los folículos.

Para rematar, el picor tan característico y molesto que se produce cuando comienza a crecer el vello de nuevo y uno no sabe ni como poner los brazos. En esos momentos no siempre es posible realizar el rasurado de nuevo ya que en ocasiones el vello no tiene la longitud necesaria para ser cortado por la cuchilla y toca esperar.  

También está la cera, claro que sí. Pasa que duele, y claro que duele: estamos arrancando el vello de la piel a tiras. ¿No va a doler? En muchos casos al tirar de la cera, se lleva la capa protectora de la piel y de nuevo granitos con pus, foliculitis. En cualquier caso, la victoria de estar sin vello tan sólo dura unas semanas y todo comienza de nuevo.  

¿No te parece más inteligente una sesión de depilación láser axilas hombre cada 2 o tres meses hasta que quedes satisfecho con el resultado?